miércoles, 9 de abril de 2008

Reflexiones


Abro los ojos. Estoy sola, es totalmente de madrugada, pero la luz de mi habitación está encendida... olvidé apagarla antes de dormir. No, espera, no lo olvidé, me da miedo la oscuridad.

-Esto... ¿es un sueño?
"No, es totalmente real, ¿no lo ves? Día a día, todo es real".
-¿Existe la vida? Me da miedo pensar que vivo de verdad.
"¿Miedo a vivir de verdad?"
-Miedo de respirar, de mirar a mi alrededor, de saber que es verdad.

"Eres una cobarde".

-Vivo como autómata, no pienso en cada segundo que vivo algo real.

"¿Eres feliz de esa forma?
-No me lo cuestiono. Sólo lo hago cuando estoy aquí, en la cama, y puedo oírte con claridad.
"¿Porqué quieres oírme?"
-Porque tú siempre dices mi verdad.
"Siempre digo lo que quieres escuchar".

-No me gusta vivir, me da miedo. Es más fácil conciliar el sueño, y vivir dentro de él.

"Soñando no vives".

-Pero de igual forma muero.

"¿No crees que vale más la pena morir habiéndo vivido?"

-Moriré de cualquier forma.

"Si cierras los ojos y no vives en lo real, entonces no habrás vivido de verdad".


Después, silencio.

-Tengo miedo.
"Lo sé".